sábado, 14 de abril de 2012

PUBLICAÇÃO NO MÉXICO DE UM TEXTO DE IMPRESSÕES DE DUDU OLIVEIRA SOBRE O FESTIVAL NO MÉXICO ONDE APRESENTAMOS O ORAÇÃO






Nostalgia de la voz de Dudu OliveiraSão Paulo, Brasil, 1 de octubre de 2011


Continuo extasiado. Sin una duda, la mejor experiencia cultural que he tenido en los últimos tiempos. Un festival pensado y organizado por una de las compañías más importantes de teatro de América Latina que ha impresionado a los espectadores y a las compañías cuidadosamente seleccionadas.  Diez funciones divididas en diferentes espacios de la linda Ciudad de Mérida fueron presentados ante una animada y ávida audiencia por la cultura y el arte. Una audiencia generosa y atenta a las diferentes propuestas de las compañías participantes, cada uno los resultados de sus investigaciones estéticas. 
Las características de cada espectáculo elegidos por la curaduría exploraron los diversos lenguajes que irían desde un discursos formal en un teatro convencional a la experimentación preformativa en contexto de calle o en las salas del Museo de Arte Contemporáneo de Yucatán.
Los anfitriones del festival abrieron magistralmente con sus Viñetas Chejovianas en un antiguo predio donde pudimos ven en escena a los brillantes actores de diferentes edades de la compañía bajo la impecable dirección de Raquel Araujo. También tuvimos un hermoso y conmovedor homenaje a maestros de larga trayectoria teatral en Yucatán.
En el segundo día tuvimos el honor de acompañar a Ana Correa de la ciudad de Lima (Perú) con la presentación de Rosa Cuchillo, el público local y los invitados estuvieron encantados con la vitalidad y la belleza de quien sería un icono durante la festival con su generosidad y sus conocimientos a través de sus talleres y coloquios.
Por la noche tuve el gran honor de presentar al lado de Reggie Coutinho con Cínica Cía. Desde São Paulo trajimos Oração texto de Fernando Arrabal y Dirección de Solange Dias con la coproducción de Teatro de la Conspiración. Un momento de mucha aprensión porque éramos el único grupo que interpretarían en portugués. Apenas iniciamos la función notamos la participación increíble del público y su enorme generosidad con nosotros.
El día 20 tuvimos el placer de asistir a una función local en un espacio alternativo, El viaje inmóvil, un intrigante espectáculo sobre el suicidio bajo la dirección de Juan de Dios Rath.
El siguiente trabajo fue Medea y Jasón en una casa especialmente preparada para ello y donde el público estaba libre para acompañar por donde quisiera el espectáculo cuyo foco era la relación de amor y odio desde un marco de la dramaturgia universal. Un ejemplo de dedicación y organización proporcionaron a los espectadores esta vivencia fascinante.
El día 22 tuvimos una descarga de energía e imágenes venidas de España con Líbera Teatro y sus espectáculo Ensayo para una despedida. Impactante, fuerte y directo. Mucha energía en cada escena y fuera de ella.
La Rendija Nómada tomó las calles del centro de la Ciudad al día siguiente, sorprendiendo a los participantes del festival y en las principales y populosas calles de la Ciudad. Con la colaboración de Gustavo Bendersky, joven e inquieto artista argentino que se encuentra en camino a destacarse como  creador escénico de América Latina.
Tania Solomonoff mostró su formidable creación Madera, en la que interpreta una inesperada relación con los objetos mostrando momentos de alto riesgo y ternura, aproximaciones a través de la improvisación en movimiento. Tania nos presentó también su técnica de meditaciones dinámicas por las mañanas en su taller.
De Buenos Aires vimos Una mujer que no duerme, un montaje inspirado en los cuentos de la escritora brasileña Clarisse Lispector. Verónica McLoughlin y Juliana Muras entregaron un bellísimo y sensible trabajo.
El último día del festival el público infantil pudo asistir a El cofre de Piratlilla de Alejandra Díaz de Cossío, de la ciudad de Morelos. Una fábula con muñecos que crea una enorme empatía con los espectadores. Sobre el tema de la preservación de nuestros tesoros marinos abordado de manera inteligente y dinámica.
Por las tardes tuvimos tres coloquios, el primero Prácticas escénicas en tiempos de violencia, el segundo Organizaciones actuales de teatro de grupo y por último El cuerpo del perfomer en las prácticas escénicas actuales.
Nunca tuve tanta información, imágenes y emociones como en estos días. La mayor impresión que traigo a Brasil es que me sentí en familia. Una organización increíble. Un cuidado como de madre a sus hijos, estuve entre amigos.
Quiero muy pronto regresar a Mérida.